La Lengua de las Mariposas· José Luis Cuerda

España - 1999

Hay un momento en la vida del espectador desapercibido en el que los sentidos se agudizan y la sensibilidad se activa por un estimulo agresivo y dulce que ataca desde la pantalla. Bueno, no se si sea algo que a todo amante del cine le pasa, o si sólo a mi me pasó de esa manera, pero me parece que el gusto por el cine empieza sea por una circunstancia o por una película, en mi caso esa película se llama La lengua de las mariposas. Ya no recuerdo hace cuanto tiempo la vi por primera vez, pero desde ahí el cine se convirtió en una necesidad constante, ya no recuerdo cuantas veces la he visto, pero cada vez que la veo me entran las mismas dudas acerca del amor, de la fe, de la vida, y hasta del mismo tema de la educación en contextos políticos tan complicados como los latinoamericanos a estos tiempos, esta es, en una palabra, una película que habla sobre amor y libertad. ¿Daría su vida por una idea?

Basada en un cuento escrito por Manuel Rivas, la historia tiene lugar en bellos escenarios rurales de la España del año 1936, que contrastan con la fuerte carga emocional que encarnan los personajes principales. Estamos en los días que antecedieron a la guerra civil española y allí aparece Fernando Fernán Gómez (1921-2007) (Don Gregorio), literato, académico, cineasta, actor, en una palabra, figura central dentro del espectro cultural español, personificando a un maestro de ideas republicanas, y Manuel Lozano, Moncho, un niño que encarna toda la dulzura, la inocencia y también la curiosidad típica de su edad. Moncho encuentra en Don Gregorio un maestro y guia en tan variados aspectos como lo son los propios del saber y de la vida, mientras el mismo Don Gregorio muestra cierta simpatía por el curioso niño. Tras un evento que representa el estallido de la guerra civil y el drama que viviría España con el Franquismo, la relación del niño y el maestro se ve abruptamente interrumpida.

Un film para la memoria histórica, una lección de vida o una historia más, veala como quiera, pero veala, una historia conmovedora y un final que queda en la memoria; no es para amantes de la ciencia ficción, nada de eso es ficción, todo ello hace parte de la historia reciente de los españoles y de la historia política de occidente, no es para verle efectos especiales, es una película muy sencilla a nivel visual, sin embargo si hay que decir que la fotografía es hermosa, y la musica -hecha por Alejandro Amenábar-, un aporte esencial dentro de la atmósfera tan intima y tan conmovedora en la que se desarrolla la historia. Alrededor de Don Gregorio y Moncho hay otros personajes y otras historias dentro de una narración de lo cotidiano que hace el marco perfecto para aquellas dudas que rondan la mente de Moncho acerca del origen de las cosas, de su por qué, de las mujeres!, de la lengua de las mariposas...